Nació el 5 de marzo de 1942 en Sevilla, dónde se licenció en Derecho y ejerció algún tiempo como abogado laboralista. Comenzó su militancia socialista, en la clandestinidad, primero en las Juventudes Socialistas y después en el PSOE, siendo elegido secretario general, en el Congreso que el partido celebró en 1974 en la localidad francesa de Suresnes, cargo en el que permanecerá hasta 1997. En su vida política ha sido diputado al Congreso en todas las legislaturas desde 1977 hasta el año 2004. Fue vicepresidente de la Internacional Socialista desde 1978 hasta noviembre de 1999; y presidió la Comisión «Progreso Global» para la renovación de la Internacional Socialista, creada en septiembre de 1996. Pero será seguramente recordado en la historia de nuestro país como el impulsor de la renovación de su partido, en consonancia con la socialdemocracia europea, y sobre todo, por la profunda modernización de España puesta en marcha tras el triunfo arrollador en las elecciones de 1982, que le llevaron a la Presidencia del Gobierno por mayoría absoluta. Durante los casi catorce años de mandato, siguió una línea política de izquierda moderada, progresista en aspectos fundamentales como la profundización de la democracia y las libertades, la progresividad fiscal y, sobre todo, la universalización del derecho a la educación y la sanidad pública y gratuita, piezas clave de su política social y de la defensa del estado de bienestar. Hoy Felipe González es una referencia internacional como estadista y político progresista tanto en Europa como Iberoamérica.
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